
Las razas de perros Shiba Inu son una de las más pequeñas originarias de Japón. Criados para ser perros de caza en las regiones montañosas de su país de origen. Su nombre tiene como significado “perro pequeño” en japonés. Incluso se los considera una versión más pequeña de los Akita inu. Siendo también una de las razas más antigua de Japón. Más domesticable que un perro lobo, pero con algunas características similares.
Esta raza es muy atenta por lo que siempre está interesada en lo que sucede a su alrededor. También son reconocidos como mascotas confiables y amantes de la diversión.

También los Shiba Inu pueden desplazase por terrenos escarpados como ningún otro perro, siendo así conocidos por su habilidosa personalidad enérgica. Hasta el punto de que muchos los llegan a comparar con un gato.
Mucha gente se siente atraída por el Shiba Inu por su tamaño accesible, su resistencia, su apariencia y su fácil manera de mantenerlos. También son muy devotos, por ende son muy unidos a sus familias, esto significa que no son perros para dejarlos solos por mucho tiempo.

Así que conoceremos más aún a esta adorable raza de perros, cuya apariencia los asemeja un poco a los zorros y cuentan con una destreza similar a la de un gato.
Historia del Shiba Inu
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Se cree que el Shiba Inu es una de las razas más antiguas de Japón, y que su ascendencia podría remontarse a miles de años atrás, dado a que se han encontrado recipientes con su apariencia en el siglo 3 a.C.
Se originó junto con otras razas, tales como el Akita, el Shikoku, el Kai, el Hokkaido y el Kishu. De los cuales varios llevan el nombre de donde procedían de las distintas partes de Japón.

El Shiba Inu era entrenado para ser usado como perro de caza, con el propósito de eliminar aves pequeñas. En 1928 se había fundado una organización para poder preservar a los perros japoneses, con el objetivo de evitar que varias razas de perros nativas pudieran llegar a desaparecer. También durante años posteriores se consideró a la raza de Shiba Inu como uno de los tesoros nacionales de Japón.
Aunque después de la llegada de la Segunda Guerra Mundial, muchas de estas razas sufrieron una disminución drástica de su población, y entre estas razas se incluía a los Shiba Inu. Pero logró salvarse de una posible extinción debido a los varios Shiba que se pudieron encontrar en lugares remotos de Japón.

Para su mala suerte también llego otro golpe a su población cuando en los años 1950 se desató un brote de moquillo (o enfermedad de Carré) en Japón. Después de este evento solo quedaron algunas variables de los Shiba Inu, cruzándolos para poder tener el Shiba Inu moderno.
Aunque esta raza se llegó a ser exportada en algunas épocas, no fue sino hasta 1993 que se pudo reconocer de manera oficial a las razas de perros Shiba Inu.
Apariencia de la raza de perro Shiba Inu
Los Shiba Inu son perros pequeños, con una altura promedio de 36 a 41 centímetros, tienen una apariencia semejante a los Akita Inu, por lo que muchos creen que los Shiba son una versión pequeña de los Akita Inu.
Tienen unas orejas pinchadas y pequeñas, con sus ojos entornados y cola rizada. Con un cuerpo moderadamente compacto, ligeramente largo, y una expresión de buen carácter de pelaje grueso. Junto con una barriga muy escondida, lo que suma a la apariencia atlética de ellos.

Se les puede hallar de varios colores como el negro, blanco, rojo y con una barriga de color blanco.
Estos perros se asemejan un poco a los zorros. Y también por su pelaje no es de sorprender que se les confunda con peluches. Tienen pelaje abundante con doble capa, lo que los ayuda para afrontar el invierno aunque puede llegar a veces a ser molesto cuando se trata de mantenerlo.
Temperamento del Shiba Inu
Las razas de perros Shiba Inu son educados, con buen carácter, alertas y audaces. Son fuertes y confiados, y también son leales y cariñosos con su familia, aunque tienen la tendencia de sospechar de cualquier extraño. Esto hace que sean perros guardianes natos, siempre estando alertas en su entorno.
Ellos tienden a ser un poco territoriales a la hora de proteger su comida, juguetes o territorios. Y tienden a no llevarse bien con otros perros, en especial si son más pequeños, por ende no dudarán en perseguirlos por su naturaleza de perro cazador.

Algo curioso de ellos es que no ladran como tal, sino que ellos hacen un sonido único, que es conocido como “El grito Shiba” que normalmente lo hacen cuando ellos no están contentos o no están a gusto con su entorno.
Son perros muy inteligentes y les encanta complacer, esto es ideal para los dueños de estos Shiba porque significa que su entrenamiento les será fácil y divertido, sin embargo, son de esos perros que les cuesta concentrarse, así que se debe procurar de hacer secciones cortas de entrenamiento. De igual modo, aman estar cerca de su dueño e involucrase con todo lo que sucede en su alrededor.

Esto hace que los Shiba Inu sean buenos perros para dueños primerizos, siempre y cuando se tenga el tiempo para dedicárselo a su compañero canino.
Personalidad del perro Shiba Inu
Atrevidos y bondadosos, el Shiba Inu no es de querer una cosa, sino que lo quiere todo. Desde lo que uno está comiendo, hasta todo el cariño de la persona. Es por ello que muchos dueños llagan a establecer límites con ellos para evitar que cuando crezcan sean complicados de manejar.
Ya que son perros independientes, con dignidad, y reservados hacia los extraños, muchas veces se les describe como un felino. Hasta llegan a lavarse la cara con las patas, incluso llegando a emitir un sonido casi como un ronroneo cuando se les acaricia.

Debido a su naturaleza distante, muchos dueños se aseguran de socializarlo lo suficiente, tanto con otros animales como con la familia, para que puedan reconocer a los miembros de la familia bien y no haya problema para interactuar con ellos cuando crezcan.
Esta raza robusta está siempre en busca de hacer travesuras, llegando a ser dominantes y testarudos. Algunos Shiba Inu ladran más que otros, aunque más que ladrar emiten un sonido peculiar de esta raza.
Al ser un perro enérgico le encanta pasear y correr con sus dueños. Es considerado como artista del escape, de manera que muchos se aseguran de tener cerrada cualquier puerta o valla, o de que no haya algún lugar en donde pueden darse a la fuga.